Mafalda

Conociéndome me sorprende que hasta hoy no me haya decidido a hacer mi mini homenaje a Mafalda, este simpático personaje inventado por Quino a mediados de los 60.

Desde siempre me ha gustado esta pequeña de seis años, con su voluminoso pelo de color oscuro y que odia la sopa. Aunque sin duda alguna lo mejor de ella son sus comentarios y conclusiones, como muchas veces con sus historias y preguntas, deja helados a los adultos.

En fin, Mafalda y sus amigos: Felipe, Susanita, Libertad, Manolito, Miguelito y por supuesto su hermano pequeño Guille. Todos ellos me han acompañado durante muchos años, en las carpetas de la universidad, alguna que otra agenda y ha conseguido sacarme una sonrisa todos los días del año cuando tenía un calendario de mesa.

Adiós al CowParade

El pasado domingo, se acabó el CowParade de Madrid, esa exposición intinerante que llegó a nuestra ciudad el pasado 16 de enero y que nos ha hecho disfrutar durante dos meses de la presencia de unas simpáticas vacas.


Os enseño a la Vaca Paca, esta vaca era una de las que más me gustaba. La foto la tomé dos semanas antes de que se acabara la exposición. Estaba situada en el paseo de Recoletos. Hubo un tiempo que cuando pasaba por allí no la ví, imagino que por desgracia, como otras muchas vacas, tuvo que pasar por el hospital que habían preparado para arreglar los desperfectos que han sufrido casi todas.



En la foto se puede observar que aún tiene su cabeza con su peineta, una semana después, pasé por delante y a la pobre le faltaba la pata derecha y la cabeza, ¿por qué? No lo sé, no entiendo qué puede tener de bonito tener en tu casa una cabeza de una vaca con una peineta. Si sólo fuera esto lo que no entiendo...

¿Qué tendrá de divertido pintar, arrancarle partes o incluso robar una vaca que sirve para decorar durante un tiempo las calles de tu ciudad? En fin, luego me hace gracia cuando en algún reportaje de televisión sacaban a alguno de esos 'animales' y decían que les daba igual, que ya pagaría los desperfectos Gallardón...ay!! Gallardón, jajjajajjaa... cuando entenderá esa gente que los políticos de turno no pagan los desperfectos de las ciudades o países con dinero de su bolsillo... lo pagan con el dinero de todos, pero en fin... así nos va...

Concierto de The Killers en Madrid

Ayer tuve la oportunidad de ver a The Killers en directo en el Palacio de los Deportes de Madrid. Una tarde de domingo, antes de ir al concierto quedamos en casa de una amiga para ir a tomar unas cervezas y la verdad es que estábamos ahí sentados y no teníamos ningún espíritu conciertero, pero llegó la hora de ir allí y sobre todo los minutos antes de que el grupo saliera al escenario y la tensión y la emoción estaban latentes.

Pasaban un poco las 21.30 de la noche y un sonido monótono anunciaba la salida de The Killers a un escenario decorado con palmeras, (guiño a Las Vegas) tras casi un minuto de este repetitiva música comenzó el concierto con Human, primer single y ahora canción más conocida del grupo estadounidense ya que se puede escuchar en todas las radiofórmulas españolas. A su favor hay que decir que es una sintonía pegadiza y que gracias a eso, las 15.000 personas allí presentes entonaban la canción al unísono.



Tras esta apertura Brandon Flowers, cantante y líder de The Killers, dirigió sus primeras palabras, en castellano a un público completamente entregado. `Somos The Killers y estamos aquí para serviros´. Tras la interpretación de Human, vino This is your life, canción también incluida en el último álbum. Este tema estuvo seguido por el conocido Somebody told me otro tema que movió a todos los asistentes, que mientras no botaban no paraban de cantar.

For reasons unknown, seguida de la bucólica I can't stay y de la movidita Joy Ride, ambas incluidas en Day & Age, seguían metiendo al público en el ambiente. También hay que tener en cuenta que Brandon Flowers, intentaba interactuar más con la gente.

Bling (confessions of a king), canción que también tarareó la gente, Shadowplay, Spaceman y Smile like you mean it, iban sonando casi sin descanso. Luego llegó el turno de la emblemática A Dustland Fairytale y la no menos Sam's Town (en la versión de Abbey Road). Las canciones de otros álbumes siguieron sonando Read my mind, seguida del señor optimista (Mr. Brightside) y All these things that I've done. Ambas interpretadas al pie de la letra por todo el público del Palacio de los Deportes.

Tras una breve pausa, en la que la gente al unísono coreaba un (oé, oé, oé...), Brandon Flowers y los suyos volvieron a salir al escenario, para entonar Bones, con el famoso videoclip realizado por Tim Burton a sus espaldas. Tras este tema, dos canciones más tranquilitas que iban a anunciando el final de un concierto muy bueno (The world we live in y Jenny was a friend of mine).Y ese final llegó con un temazo como es When we were young.

Tras esta canción, fin, ya estaba todo acabado, 1 hora y media de buena música con un público entregado y un grupo bastante más empático con la gente que otras veces. Un concierto para muchos importante y porqué no, bastante mágico pero que puede que supiera a poco. Lo esperas con tantas ganas que cuando se acaba no te lo puedes creer, quieres que siga y siga...

No queda otra que esperar hasta la próxima y que no esté muy lejana. Gracias The Killers, por hacernos pasar un buen rato en esta tarde noche de un domingo de marzo.

Ay! Los lunes

Hoy es lunes, ése día tan odiado por muchos. La verdad es que siempre se reciben con poco cariño porque después del fin de semana siempre cuesta ponerse en marcha, volver a la rutina diaria, al trabajo, las clases, en fin... todos esos quehaceres de la semana que tanta pereza da empezar después de estar disfrutando del tiempo libre del sábado y del domingo. Los lunes siempre son perezosos y eso que ya no son findes de juergas constantes, pero aún así el madrugar lo llevo muy mal.

Para empezar la semana con más ganas, me gusta escuchar música que me dé buen rollo. Una que se me ocurre ahora es la canción de MGMT, Time to pretend. ¡Qué la disfrutéis! ¡Buen lunes para todos!

Promesas e ilusiones

El otro día en mi mp3 empezó a sonar una canción de The Smashing Pumpkins, no recuerdo exactamente cuál era, pero sin querer mi memoria retrocedió unos 10 años y me acordé de la que por aquél entonces era amiga mía. Bueno de ella y las otras cuatro, éramos un grupito de cinco amigas. Cinco amigas del cole inseparables, que a pesar de la cantidad de horas que pasábamos juntas, llegábamos a casa y ya estábamos cogiendo el teléfono para llamarnos y contarnos lo que nos había pasado en la media hora que llevábamos separadas. No todo era idílico, de vez en cuando teníamos nuestros roces pero enseguida se olvidaban.

Cinco adolescentes con un montón de sueños e ilusiones puestos en el futuro, un futuro que veíamos igual, cada una con su vida pero siempre contando con el apoyo de todas. Han pasado los años y nada más lejos de la realidad de aquellas promesas de chicas de dieciséis años. La unión duró hasta mediados de primero de carrera, en ese momento se descolgó una, al año siguiente otra. Quedábamos 3 y ahora podría decirse que somos 2.

Ahora echando la vista atrás me acuerdo de las palabras de mi hermana cuando yo le decía que nosotras 5 íbamos a ser amigas para siempre, y ella me decía, 'ya verás como no, como mucho os llevaréis dos o tres'. Yo no la quería hacer caso y al final ha tenido razón. Ahora somos 2, con nuestras vidas independientes más o menos encarriladas, pero siempre contando con el apoyo de la una y la otra. A lo largo de estos años hemos conocido a un montón de gente, personas maravillosas que permanecen a nuestro lado, otros han desaparecido pero siempre hemos contado la una con la otra. E incluso el paso del tiempo ha afianzado una amistad que al principio comenzó un poco tambaleante.

En fin, nos vamos haciendo mayores y nuestros caminos se van separando, te encuentras de vez en cuando y todo bien, pero te das cuenta de que todos esas promesas de cuando tenías 16 años, de esas amistades eternas se quedan en eso, en ilusiones. Unas, por suerte, permanecen pero otras poco a poco se van perdiendo.

Un texto cíclico y vamos a acabar como comenzamos hablando de The Smashing Pumpkins. Disfrutad de su canción Stand inside your love.

El atardecer

Me encanta los colores del cielo en los atardeceres. Esta foto está hecha en Ibiza en el mes de agosto de hace dos años. Me encantan los tonos que deja el sol en el cielo desde el rojo hasta el amarillo, todo ello minutos antes de que se lo trague el mar en el lejano horizonte, esa línea que nos deja distinguir donde acaba el cielo y empieza el mar.